3 cosas para aprender de MECÁNICA AUTOMOTRIZ
3 cosas para aprender de MECÁNICA AUTOMOTRIZ
A veces en el afán de aprender, aprendemos las cosas mal. Y no está mal que las aprendamos así, porque es la primera vez, es el primer tiro, por decirlo de alguna manera.
No está mal aprender las cosas mal si es el primer paso para aprender algo. Tal vez no tenés opciones, tal vez no tenés la información necesaria. Querés aprender, y más vale aprender algo un poco mal que directamente ni siquiera intentar aprenderlo.
Lo importante de todo es que, a medida que pasa el tiempo, empieces a corregir las cosas que aprendiste mal. Así que de eso vamos a hablar hoy.
Si te gusta la técnica automotriz y aprendiste algunas cosas mal, es momento de mejorarlas y aprenderlas bien.
Todos aprendimos a andar mal en bicicleta. De hecho, primero tal vez le poníamos las rueditas a los costados. Una vez que le sacamos las rueditas, no hacíamos bien equilibrio, no podíamos frenar como correspondía, frenábamos apoyando el pie, gastábamos las zapatillas…
Y no está mal empezar a aprender así, porque es la forma que tenés de empezar. Lo malo de todo esto es no avanzar y quedarte con ese primer aprendizaje que no fue del todo correcto, pero que fue suficiente como para ponerte en movimiento.
Es necesario que vos ahora lo empieces a mejorar, que lo empieces a hacer más dinámico, más efectivo, y en muchos casos que tires un poco todo lo que aprendiste antes, que lo tires a la basura y arranques de nuevo con algún conocimiento, pero con técnicas totalmente distintas.
Así como en el ejemplo de aprender a andar en bicicleta, hay cosas que las aprendemos mal, pero es el primer paso.
A la hora de aprender cosas sobre técnica automotriz pasa exactamente lo mismo. En un primer momento vas a leer algo o te van a contar algo que no es exactamente cómo suceden las cosas. Tal vez no está bien fundamentado, tal vez está totalmente equivocado, pero va a ser el puntapié inicial para que vos empieces a estudiar, empieces a aprender.
Lo importante, una vez más, es que con el tiempo vos deseches todo eso que aprendiste mal y lo empieces a aprender bien.
Ahora te voy a dar unos ejemplos en todo lo que tiene que ver con técnica automotriz. ¿Cuáles son estas cosas a las que yo me refiero? Dejá de lado y empezá a arrancar de nuevo.
Primer punto: desechar todo lo que se aprendió mal o se aprendió por intuición, pero que en la realidad es diferente.
Un ejemplo muy clásico, muy básico: si vos apretás sobre el pedal de freno vas a frenar. Y eso es verdad, siempre y cuando tengas adherencia en el piso que le permita al neumático transmitir las fuerzas de frenada al piso.
Y también si tu sistema de freno está en condiciones de generar las fuerzas de frenado que necesitas.
Muchísimas veces pasa que la gente está conduciendo en una calle con hielo, quieren frenar, aprietan sobre el pedal de freno —hablamos de autos sin ABS— y no pasa nada. Siguen apretando cada vez más fuerte… y no pasa nada.
¿Por qué? Porque las ruedas están bloqueadas. Y si las ruedas están bloqueadas, no tienen absolutamente ninguna capacidad de transmitir fuerzas al piso.
Entonces ese concepto de que si vos apretás el freno vas a frenar, es erróneo. Vos vas a tener que apretar el freno, ver que tu sistema tenga potencia de frenado suficiente y que la adherencia entre piso y neumático sea adecuada.
Otro concepto erróneo: la potencia.
“Me quiero comprar un auto que tenga más potencia porque necesito potencia para repasar.”
No entienden que en realidad la potencia es un cálculo entre el par motor y las revoluciones. En la gran mayoría de los casos, la gente te dice: “Quiero un auto con 150 caballos para repasar.” Pero esos 150 caballos los encontrás a 5,500 RPM con el pedal a fondo.
Y esa misma persona, que maneja a 2,500 RPM, cree que ya tiene esos 150 caballos disponibles. Totalmente erróneo.
Cuando vos comprás un vehículo y ves la curva de potencia, vas a ver que tal vez a 2,500 tenés 70 caballos, y los 150 recién aparecen al final del rango de revoluciones.
Otro error común: “los mejores neumáticos van en las ruedas que traccionan.”
Totalmente equivocado.
Los mejores neumáticos siempre van atrás. Vos querés buscar la mayor adherencia en el eje trasero. No importa si no tenés buena tracción. Pero si no tenés estabilidad al frenar, el auto se puede ir de cola, especialmente si no tiene ABS.
Así que, los mejores neumáticos siempre atrás.
Otro punto importante: dar los primeros pasos con gente que sepa. No con gente que dice saber.
No tomes a tu primer referente como alguien que sabe todo. Tomalo como alguien que te da el primer empujón. Pero si esa persona no se dedica profesionalmente a la técnica, diseño o mecánica, tené cuidado.
No te conviertas en alguien que se quedó con un solo referente para toda la vida. Tal vez era un gran primer paso. Pero vos necesitás evolucionar.
Yo tuve profesores excelentes en la universidad. Y si bien hoy sé que no sabían todo, sabían encarar problemas, buscar soluciones y usar la bibliografía adecuada.
Otro punto: no confundas estar convencido con tener razón.
Muchas veces creemos entender algo solo porque lo leímos una vez. Pero cuando alguien nos hace una buena pregunta, nos damos cuenta de que tal vez no lo entendíamos tanto.
Da lugar a replantearte lo que sabés. A veces aprendiste solo una parte del problema, no la totalidad.
Y el último punto: las fórmulas.
Si no conocés fórmulas, no estás en un nivel elevado de entendimiento. Vas a opinar, hablar de lo que pasó en Fórmula 1… pero no vas a poder analizar nada si no sabés las ecuaciones detrás de los fenómenos.
La ingeniería no es hablar. Es entender y aplicar ecuaciones.
Si entendés las fórmulas, vas a empezar a ver lo que antes no veías. Vas a poder razonar mejor lo que pasa en la vida real.
Por último: la arrogancia es el ruido vacío de quien no tiene nada para decir.
¿A qué me refiero? A la gente que cree saber todo. El que no quiere hacer un curso básico porque “ya sabe”. El que no quiere ir a un museo porque “ya fue”.
Y resulta que no saben definir qué es la relación de compresión. Ni conocen la fórmula.
Pasa muy seguido. Quieren ir al nivel más alto sin tener lo básico.
Así no funciona el aprendizaje.
Nadie puede leer filosofía si no sabe leer. Y lo mismo aplica acá. Tenés que empezar por lo básico, aunque creas saberlo. Porque siempre se aprende algo nuevo.
Yo tengo los museos de Mercedes y Porsche a 15 minutos. Fui decenas de veces. Y cada vez aprendo algo nuevo.
Ese es el error de la arrogancia. Creer que ya sabés. Que lo básico es para otros.
Tal vez ya sabés todo. Pero si sos como la mayoría, siempre hay algo más por aprender.
Así que metete en todos lados donde haya autos, motores, técnica. Porque siempre, siempre, vas a aprender algo.